sábado, 18 de octubre de 2014

GRAN RETO 2.014



A pesar de la buena marca que hicimos en el maratón de primavera no fue suficiente para ganar a los zamoranos en Castilla-León. Así que fue una grata sorpresa cuando nos llegó la noticia de que este año teníamos el honor de ser el equipo invitado al Gran Reto.


Acudimos a O Grove con el resto de equipos campeones para disfrutar de un fin de semana entre colegas pajareros y en un ambiente natural espectacular, muy distinto del que tenemos en el centro de la península.
Como inicialmente habíamos pensado tomárnoslo más relajado y no hacer una kilometrada decidimos empezar la jornada en la zona de O Gorve. Por lo tanto no necesitábamos madrugar en exceso y pudimos disfrutar del desayuno del hotel (acordándonos de nuestro compañero Lillo, baja por lesión de última hora).


Empezamos la jornada en la Isla de la Toja con las primeras luces y escuchamos las primeras especies de la lista, Petirrojo, Mirlo y Chochín. A medida que clareaba empezamos a ver en las orillas a los primeros limícolas: Zarapito Real, Ostrero, Aguja Colipinta, nuestro colega el Archibebe Común, Correlimos Común, Chorlitejo Grande y Vuelvepiedras.

Después de apuntar Gaviotas Sombría y Reidora, Cormorán Grande, Espátula, Garza Real y Garceta Común entre otros decidimos cambiar de sitio pero en la misma zona e hicimos un asomo en A Tellería. Por el camino que bajaba hasta la orilla nos llamó la atención un canto aflautado que asociamos con Camachuelo Común y al poco tuvimos la fortuna de confirmarlo visualmente. Unos metros después nos salió un pequeño bando de Picos de Coral.

A continuación hicimos una parada frente a la zona intermareal de Umía donde había un ambiente espectacular de bicherío con multitud de limícolas de todos los tamaños pululando por la orilla y grupos de Espátulas y Azulones.

En este momento apareció, acompañando a miembros de la organización, un grupo de reporteros de Tele5 (no podría ser otra cadena tratándose de los Archibebes Tintos) que estaban realizando un reportaje para el telediario. Podríamos decir que aquí tuvimos nuestro minuto de gloria en el maratón ornitológico.



Atendiendo a los medios...

Dejamos la zona (la mejor del día sin duda) tras apuntar nuevas especies como Garceta Grande, Anádes Silbón y Rabudo, Correlimos Gris y Tridáctilo, Archibebe Claro o Gavión.

En la playa de la Lanzada conseguimos ver Negrones y Alcatraces como más destacado.



La siguiente zona que visitamos fue el cabo Silleiro, en las cercanías de Bayona, con la idea de echar un ojo al horizonte atlántico en busca de aves marinas. La panorámica era tan bonita como fuerte era el viento lo cual dificultaba mucho la localización de aves como pardelas que vuelan cerca de la superficie. A duras penas conseguimos ver alguna que desaparecía enseguida entre las olas.



Hora de comer el picnic proporcionado por el hotel

Encontramos un paso bastante fuerte de Gaviota Sombría y de Alcatraz, aunque ambas especies ya las teníamos fichadas previamente. Sí apuntamos aquí Charrán Patinegro y Cormorán Moñudo.


El siguiente lugar a visitar fue A Guarda, en la desembocadura del Miño, pero no mereció la pena porque, a pesar del sol y el cielo azul, de nuevo el viento dificultaba la actividad. Aquí pudimos disfrutar de un grupo de Agujas Colipintas a muy pocos metros. Desde el coche vimos Cotorra Argentina, que fue una de las dos especies que vimos en exclusiva.



A continuación nos dirigimos hacia Porriño, para visitar Gándaras de Budiño, una prometedora y pequeña zona húmeda que al llegar nos encontramos arrasada por el temporal que había pasado durante la semana y en principio solo había una triste Garza Real. Sacamos de todas formas antes de irnos Rascón, y pajarillos como Reyezuelo Listado, Agateador, Curruca Capirotada o Carbonero Garrapinos.
Muy próxima a esta zona, cruzando la autopista, nos acercamos al polígono A Granxa donde entre las naves de distintas empresas se conservaban un par de lagunas. Aquí añadimos Gallineta, Focha y Papamoscas Gris (esta especie sería la otra que veríamos en exclusiva).
En este punto nos planteamos la dirección a seguir y tomamos la decisión de cambiar de estrategia y hacer una visita al interior y dirigirnos hasta La Limia para intentar conseguir especies distintas. Teníamos por delante una hora de carretera pero una vez allí podríamos contar con otra hora de luz antes del anochecer.
De camino Félix se percató de que no tenía el móvil y sin duda debería habersele caído al subir al coche en la última parada en A Granxa, pero decidimos volver a buscarlo por la noche para no perder el escaso tiempo de luz que nos quedaba.
El recorrido entre la salida de la autopista en Sandiás y la Limia estaba precioso y apuntamos Zorzal Charlo, Acentor y Cernícalo, y paseriformes tan comunes como Jilguero y Pinzón que increíblemente nos faltaban a estas alturas del día.

Lo más notable de última hora fue un Azor que nos deleito con su vuelo a campo abierto.
Con la noche ya caída teníamos que hacer todavía el camino de vuelta y además teníamos que intentar encontrar el móvil perdido así que emprendimos el retorno.

A pesar de que estuvimos haciendo varias llamadas una vez en las lagunillas de A Granxa, el móvil no apareció (alguna “buena persona” se lo había encontrado antes y pasaba de contestar a las llamadas).
Llegamos al hotel donde ya estaban cenando el resto de equipos, que ingenuos nos suponían buscando nocturnas hasta última hora.

El balance final se cerró con una escasa lista de especies (76) . Bromearíamos con el atenuante del tiempo perdido atendiendo a los medios de comunicación, pero sabíamos que el resultado era más fruto de a una mala planificación.

En este enlace se puede encontrar el dossier que preparó la organización con imágenes y resultados de este Gran Reto 2014.


sábado, 10 de mayo de 2014

XIV MARATÓN ORNITOLÓGICO 2.014



Con una previsión meteorológica inmejorable y unas fechas ideales en las que ya se esperaba encontrar la mayoría de especies estivales, comenzamos nuestro recorrido de maratón 2014 con la ilusión de hacer, por fin, una marca por encima de los 150 especies.

La experiencia de años anteriores nos ha ido sirviendo para optimizar el recorrido, tanto en tiempos como en localidades a visitar, y esto se ha traducido claramente en una progresión en el número de especies que detectamos.

Este año decidimos iniciar la jornada, todavía con noche cerrada, casi a pie de sierra para facilitar la escucha de nocturnas (aunque luego nos tocase subir al puerto de Navacerrada). La decisión fue acertada pues en seguida pudimos escuchar al Cárabo y, por primera vez, al Chotacabras europeo. Cantaban ya también a estas horas los primeros paseriformes: Petirrojo y Zorzal común.
 Como decía, subimos de nuevo el puerto a la espera del amanecer. Con menos frío que otros años fueron sumándose a la lista las especies previstas por estas alturas (Acentor común, Reyezuelo sencillo, Verderón serrano) además de otros. 
Abandonamos el puerto echando solo de menos al Roquero rojo (que nunca hemos conseguido ver por aquí en fecha de maratón).

Para variar, este año nos falló por primera vez el Mirlo acuático en su cita en Boca del Asno, pero afortunadamente veríamos una pareja en el puente de Valsaín.

Hora de desayunar algo sin por ello descuidar cualquier posible pluma o reclamo a nuestro alrededor.

 La zona de Valsaín está, como siempre, preciosa y el único defecto es no poder permanecer en ella en horas mejores para observar las rapaces en el cielo, pero queda mucho recorrido por hacer y el tiempo es limitado así que disciplinadamente dejamos la primera parte del recorrido (puerto-sierra-Granja) con alguna especie más que el año pasado. Nuestras expectativas de mejora siguen intactas. 


En la misma parada del año pasado de camino hacia el Duratón en una chopera cercana a la carretera volvemos a escuchar al Torcecuello (otro para la saca). 

La zona del Duratón se comporta de una manera similar a la edición anterior y registramos especies de páramo (collabas y alaudidos) y de roquedo, y una vez más nos fallan el Búho real, Águila real y el Halcón peregrino. 



Este año debe haber coincidido el día del maratón con los días de paso de las currucas mirlonas porque nos van saliendo en varias de las paradas de las distintas zonas del recorrido.
Añadimos también a la lista más especies de currucas (tomillera, rabilarga), y Escribano hortelano.
Dejamos tierras segovianas por encima de 100 especies, también algo superior a la cifra del año pasado a esta altura del recorrido pero una hora más pronto.


 En la parada del Duero entre Castronuño y Toro nos apuntamos las ardeidas con las que habíamos quedado, familia a la cual se uniría más tarde una de las sorpresas del día: una garcilla cangrejera en una de las lagunillas de la zona de Villafáfila.


Con mucha antelación con respecto al año pasado llegamos a Villafáfila. Gracias a esto y a que hay bastantes zonas con agua engrosamos la lista con un buen número de especies de limícolas, además de anátidas, gaviotas, pagazas y fumareles.


Como guinda de este año encontramos Búho chico en uno de los pinares isla de la zona.
Para terminar, ya con el sol desaparecido en el horizonte, pisteamos un poco para sacar las nocturnas que nos quedan y en una sola parada hacemos un pleno: Alcaraván, Búho campestre y Sisón.
Y para terminar la jornada, este año más pronto que nunca, acudimos a la cita con nuestra Lechuza (que nos da las buenas noches) con la que ponemos fin al maratón porque ya no hay más nocturnas potenciales.

Ponemos por tanto camino a Benavente donde hemos establecido el dormidero esta edición.

Muy orgullosos de superar el techo de las 150 especies, concretamente 153, y eso que como nos ocurrirá a todos fallaron especies muy comunes. ¿podéis creeros que ni vimos ni oímos un Pito real en todo el día después de cruzar Castilla y León? La mañana siguiente se le podía escuchar echándose unas risas a su estilo en la chopera frente al mirador de Benavente…


Los números de esta participación:
  Horario: 6:20 - 22:15
  Total de especies localizadas: 153
  Total de kilómetros recorridos: 404