sábado, 5 de noviembre de 2016

Gran Reto 2016

Una vez más hemos sido invitados a participar en un Gran Reto, algo que agradecemos profundamente a los organizadores del evento, la delegación de SEO-Cataluña, porque nos brinda la oportunidad de coincidir al menos una vez cada dos años con el resto de colegas "maratonianos" repartidos por el territorio nacional, además de una jornada de pajareo extremo en zonas menos habituales. Este año se celebraba en Valencia, y nos alojamos en una albergue de Alborache, una pequeña localidad muy próxima a Buñol.

En esta ocasión no pudo acompañarnos Alex.

Decidimos empezar prospectando al amanecer zonas agrícolas próximas a Requena. Con la denominación de origen vinícola era complicado encontrar campos que no fueran exclusivamente viñedos.

El comienzo no estuvo nada mal ya que no solo escuchamos sino que incluso pudimos contemplar al gran buho real. Aunque el primero que ingresó en la lista fue el petirrojo. También cantó, solo lo justo, una totovía antes de la salida del sol.
En los primeros momentos se produjo una de las anécdotas del día: "¿qué es eso va volando raseando?, ah, es un conejo".
Para aves forestales probamos en pinares próximos a la A-3 para no perder demasiado tiempo.


Como zona de roquedos inicialmente pensamos en las hoces del Cabriel pero el día anterior no habíamos encontrado un acceso fácil y rápido a una zona con buenas paredes, así que nos decidimos finalmente por el parque natural de Chera. Este paraje ha sido uno de los descubrimientos del fin de semana. Los madrileños cuando vamos a Valencia generalmente vamos directos a la costa y nos perdemos algunas maravillas que se salen algo de la ruta.


Lo habíamos cruzado el viernes y nos habían salido algunas especies como halcón peregrino, cuervo o chova piquirroja pero no salieron en el día que realmente contaban.

Nos dirigimos hacia la costa decidiendo ir primero al Marjal del moro. No resultó una buena elección pues la zona para anátidas estaba totalmente seca. Aprovechamos para comer los bocatas en la playa atentos al mar, donde pudimos ver gaviotas patiamarillas, sombrías y reidoras, charrán patinegro y alcatraz. Ni rastro de pardelas.



Camino de la albufera el navegador nos lleva por el centro de Valencia. No supone pérdida de tiempo respecto a la circunvalación y de paso nos apuntamos la cotorra argentina.
No llegamos a tiempo de visitar el Racó de l'Olla. Nos habían avisado de que había un evento que podría colapsar el acceso a la zona y que habría que ir a primera hora o por la tarde.
En la laguna había gran cantidad de patos pero muy poco variado en especies, casi todo ánade real y pato colorado y un pequeño grupo de tarros blancos. Vemos un par de águilas calzadas, una de ellas en fase oscura que a alguno le hizo sospechar inicialmente en milano negro, pero no pintaría nada aquí y ahora.


En el Portet de Sollana encontramos por fin grupos de limícolas. A pesar del viento apuntamos Andarríos bastardo y grande, correlimos común, zarapitín y menudo, agachadiza común. Los calamones también se dejan ver a placer.

Decidimos salir hacia el faro de Cullera por si conseguimos ver alguna marina más. No fue el caso. Alcatraces y charranes patinegros se lanzaban en picados de pesca muy cerca de la costa, pero éstos ya estaban en la lista.

Ya sin apenas luz dimos un paseo por el puerto de Cullera pero estaba la cosa muy apagada y decidimos relajarnos tomando algo en el paseo marítimo.


Último pájaro del día

De vuelta hacia el albergue pisteamos por los arrozales por si se cruzaba alguna nocturna pero tampoco hubo suerte.

Al final nos encontramos con una exigua lista de 79 especies que nos dejó algo tocados. Según vimos lo que habían hecho el resto de equipos las decisiones que habíamos tomado no habían sido las correctas y habíamos dejado de visitar algunos de los sitios mejores. ¡ARCHIBEBES HAY QUE ESMERARSE!

Al día siguiente la organización nos tenía preparado una visita guiada por la localidad de Buñol que resultó la mar de interesante. Ciertamente Buñol tiene muchas más cosas de interés que su internacionalmente famosa tomatina.



 Antes de despedirnos compartimos ganadores y perdedores una estupenda paella valenciana.